"Toma esas dulces promesas, tríllalas, medita en ellas y aliméntate de ellas con gozo"
“Y Rut la moabita dijo a Noemí: Te ruego que me dejes ir al campo, y recogeré espigas en pos de aquel a cuyos ojos hallare gracia. Y ella le respondió: Ve, hija mía.” Rut 2:2 RVR1960
—Cristiana abatida y atribulada, ven y espiga hoy el extenso campo de la promesa. Acá hay abundancia de preciosas promesas que satisfacen exactamente lo que necesitas. Por ejemplo: “La caña cascada no quebrará, Y el pábilo que humea no apagará, Hasta que saque a victoria el juicio.”S. Mateo 12:20
¿No satisface eso tu situación? Una caña desvalida, insignificante y débil; una caña herida; sin embargo, Él no la quebará, por el contrario, te restaurará y te fortaleza. ¿Quieres recoger otra espiga? “Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar.” S. Mateo 11:28 RVR1960 ¡Qué palabras dulces!
¿No le obedeceras y te acercaras a Él? Toma otra espiga. “No temas, gusano de Jacob, oh vosotros los pocos de Israel; yo soy tu socorro, dice Jehová; el Santo de Israel es tu Redentor.” Isaías 41:14
¡Puedes recoger diez mil espigas!
“Yo deshice como una nube tus rebeliones, y como niebla tus pecados; vuélvete a mí, porque yo te redimí.” Isaías 44:22
“Venid luego, dice Jehová, y estemos a cuenta: si vuestros pecados fueren como la grana, como la nieve serán emblanquecidos; si fueren rojos como el carmesí, vendrán a ser como blanca lana.” Isaías 1:18
“Y el Espíritu y la Esposa dicen: Ven. Y el que oye, diga: Ven. Y el que tiene sed, venga; y el que quiera, tome del agua de la vida gratuitamente.” Apocalipsis 22:17
— El campo de nuestro maestro es muy rico, contempla su abundancia. Mira allí yacen frente a ti querida amiga. Recógelas, hazlas tuyas, pues Jesús te alienta a que las tomes. No tengas temor ¡SOLO CREE! Toma esas dulces promesas, tríllalas, medita en ellas y aliméntate de ellas con gozo.